Integra las normas de trabajo fundamentales en las que coinciden los países desarrollados y los países en vías de desarrollo. Estas normas se refieren a la libertad sindical, el derecho de negociación colectiva, la prohibición de la esclavitud y del trabajo forzado, la igualdad de remuneración, la no discriminación y la edad mínima de admisión a un puesto de trabajo.