En ocasiones se ha considerado a Psusennes II, rey tanita, y Psusennes III*, rey sacerdote de Tebas, como la misma persona.
(ca. 959-945 a.C.) Último faraón de la Dinastía XXI*, sucesor de Siamón*. Su filiación es discutida: pudo ser hijo del alto sacerdote tebano Pinedyem II* o del mismo Siamón. Es contemporáneo de Psusennes III*, rey sacerdote de Tebas. De sus catorce años de reinado se ha conservado un registro muy limitado. No se le conoce ninguna actividad constructiva o decorativa. En Abydos, un grafito cita a Psusennes II en el santuario de Ptah dentro del templo de Sethy I* y una estatuilla de Thutmosis III* en Karnak fue usurpada en su nombre. Tras su muerte la corona pasó a manos de los príncipes libios que componen la Dinastía XXII*. Sin herederos varones, Psusennes II fue sucedido por Sheshonq I*, quien había contraído matrimonio con una de sus hijas. Las dos dinastías quedan así ligadas por vínculos familiares.