(1619-1637) Monarca de la dinastía de los Austrias*. Una vez elegido emperador se consideró jefe de la cristiandad y defensor del catolicismo en Alemania y Europa. Por ello después de la victoria de la Montaña Blanca, en 1618, transformo al electivo y autónomo reino de Bohemia en un estado católico, hereditario y germanizado. Estos primeros logros extendieron por primera vez el poderío de los Habsburgo en Alemania del norte y abrieron la posibilidad de un nuevo imperio germano más centralizado y dominado por la casa de Austria. Pero la intervención sueca, durante la década de 1630, en la guerra de los 30 años, aniquiló esta ambición que mantuvo sin éxito. Le sucedió Fernando III, Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico