GRIMAL, P. (1989): Diccionario de mitología griega y romana. Barcelona: Paidós Ibérica.
Nieto de Numitor.
En la leyenda de la fundación de Roma, Remo es el hermano gemelo de Rómulo. Según una explicación aislada y evidentemente tardía, se había dado este nombre al niño porque era «lento» en todo, lo cual explicaría que fuese suplantado por Rómulo. En la leyenda, Remo aparece como la réplica desdichada de su hermano. Pero mientras las leyendas griegas en que intervienen gemelos que se disputan el poder, generalmente remontan la hostilidad de los hermanos a su más tierna infancia; la de Rómulo y Remo, por el contrario, los presenta al principio unidos por un fraternal afecto. Remo no empieza a desempeñar un papel destacado hasta que, ya llegados a la edad viril los dos hermanos, se produce la querella que los enfrenta con los pastores de Numitor. Remo fue hecho prisionero y llevado ante el rey de Alba; para libertarlo, Rómulo, aconsejado por Fáustulo, organiza una expedición contra la ciudad. Sigue luego el episodio del reconocimiento de los gemelos por [[Numitor]] y la muerte de Amulio. Rómulo y Remo confían el trono de Alba a su abuelo Numitor, que es el legítimo heredero. Luego parten los dos a fundar una ciudad. Están de acuerdo en principio; desean establecerla en el lugar en que han sido salvados, o sea, en el emplazamiento de la futura Roma. Pero en su ánimo no han determinado aún el sitio exacto, y, para conocerlo, resuelven —por consejo de Numitor— consultar los presagios. A tal efecto, Rómulo se instala en el Palatino, y Remo, en el Aventino. La ciudad será levantada allí donde los presagios sean favorables (GRIMAL 1989: 466).